Diciembre de 2008. El origen de todos mis males...
Parece mentira que hoy pueda llegar a decir eso, es increíble como te puede cambiar la vida cuando das con una persona, las vueltas que da todo en cuestión de días, y digo el origen de mi caos porque desde aquella fecha mi vida dio un giro espantoso, resultado de un amor que aun sigue pero de que manera...si yo llego a saber mas de una cosa, no hubiera dado un gran paso, ahora me gustaría haberlo dado, porque no me arrepiento de ello, pero cambiando bastantes cosas que hoy día me hacen infeliz. A veces me da por volver al pasado, y decir que todo empezó en una fría tarde de diciembre, yo me calentaba con las mariposillas que salían de mi estomago...era increíble,el primer amor y el mas verdadero que he tenido nunca y tendré, porque amor que mata nunca muere...tenia el presentimiento de que la cosa iba a ir para largo...y así fue, no me equivoque, lo que no sospechaba ni de lejos era que iba a perder cosas que no puede compensar ni el mismísimo dinero, costumbres, hábito, amistades...todo se fue echando a perder, pero yo no me daba cuenta, todo a mi alrededor cambiaba para mal, falta de estudio, amistades dejadas de lado...en fin, pero claro, para mi, que estaba envuelta en una esponjosa nube de amor,todo pasaba a mi alrededor color de rosa, sin darme cuenta, o sin querer darme cuenta, de la cruda realidad, de como estaba empezando a desperdiciar mi vida, mis cambios de horario, mis desfases, que tenían como consecuencia un bajo rendimiento en todos los sentidos, vivía por y para el, los avisos no servían de nada, yo estaba ciega como nunca en mi vida había estado por nadie, conocer el amor verdaderamente es una patología, depende de como te entre, así sales de el, si te entra fuerte te zarandea de una forma que te deja sin aliento, y si te entra flojo no sacas nada bueno, pero tampoco malo...A mi me entro demasiado fuerte diría yo.
Pero todo es una contradicción, esto sigue para adelante y no se muy bien por que, tal vez porque lo quiero?
Sí, yo creo que no puede haber otro motivo...el orgullo no le gana el pulso al corazón por muy fuerte que sea ni siquiera en esta ardua guerra sin cuartel que se bate entre ellos, es como querer sin querer, o querer sabiendo lo que vas a tener pero aun así tener miedo a una despedida definitiva, es tanto lo vivido que nubla todo lo demás.
Y nada, aquí sigo, todavía con un te quiero a flor de piel siempre que se presenta la ocasión, porque a pesar de todos los palos todavía tengo la capacidad de creer en las personas, soy ese ángel caído del que ya he hablado alguna vez, que tal vez cayó por perder la fuerza luchando por esa persona...por la que vivió tanto tiempo, vivía en una burbuja rosa, pero esa burbuja exploto, liberando la poca fuerza que le quedaba entre sus dedos tan frágiles y esperando a que lo bueno llame a su puerta sin tener que moverlos, y es que es tan largo el olvido que preferimos lo malo conocido que lo bueno por conocer, aunque nos destroce la vida, así va el mundo...de mi interior
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